Es muy importante aprender a reconocer, cuidar y estudiar la naturaleza dentro de nuestras ciudades.
Cada día somos más conscientes de la crisis ambiental que estamos viviendo, especies de animales y plantas están desapareciendo a un ritmo acelerado frente a nuestros ojos. La pérdida de biodiversidad crea una urgencia de aprender, estudiar y proteger a las especies con las que compartimos el planeta. Uno de los lugares para empezar esta tarea es en las ciudades, ya que desde el 2007 hay más humanos viviendo en ciudades que en zonas rurales; de hecho, Naciones Unidas anticipa que para el 2050, 75% de la humanidad va a vivir en centros urbanos.
Es muy importante acabar con el mito de que la naturaleza es incompatible con los espacios urbanos; y aprender a reconocer, apreciar y cuidar al mundo natural de nuestras ciudades. En los lugares más densamente poblados del planeta los humanos coexistimos con miles de otras especies, como las aves. Estos animales son considerados por varios ecólogos como bioindicadores de sus ecosistemas, ya que son fácilmente observables, sensibles a tóxicos y viven en todos los eslabones de la cadena alimenticia. Una ciudad con aves es una ciudad con ecosistemas saludables. Estos animales son nuestros vecinos, hacen parte de nuestros paisajes urbanos y el primer paso para protegerlos es aprender a reconocerlos. Hoy vamos a explorar 10 aves que se pueden encontrar fácilmente en 10 de los centros urbanos más poblados de América.
1. Tucán Pico Verde – São Paulo
Los tucanes no viven solamente en las selvas tropicales, algunos se pueden encontrar en la ciudad con mayor población del continente, como el tucán pico verde. Su hábitat tradicional son los bosques montañosos del norte de Argentina, Paraguay y el Sur de Brasil. En São Paulo se pueden ver por el campus de la Universidad de São Paulo, en el barrio de Morumbi, en el Jardín Botánico, Parque do Carmo y en el Parque Praia do Sol.
Normalmente se pueden encontrar en parejas o en pequeños grupos familiares. En esta especie de tucán, los dos padres se reparten equitativamente todas las labores para cuidar de sus crías; desde tiempo de incubación sobre el huevo, hasta la búsqueda de alimentos y alimentación de los polluelos. La palabra tucán viene del nombre que usaban los indígenas Tupi para estos pájaros.

2. Colibrí Pico Ancho – Ciudad de México
Este pequeño colibrí se puede encontrar en todo México. Cuando se ve de lejos pareciera tener un color verde/azul oscuro, pero al verse de cerca y bajo la luz del sol, se puede admirar una variedad de azules y verdes iridiscentes. Las hembras tienden a ser menos coloridas y tener un plumaje más gris. Para sobrevivir estos animales tienen que comer casi el doble de su peso en néctar todos los días; sus patas son tan pequeñas que no sirven para caminar o saltar, solo se pueden mover volando. Se pueden ver estos animales en toda la Ciudad de México, son más abundantes en los Bosques de Chapultepec, Bosque de San Juan de Aragón, Viveros de Coyoacán y por el campus de la Universidad Nacional Autónoma de México.

3. Gaviotín Inca – Lima
Posiblemente una de las aves marinas más hermosas del planeta, es muy fácil de identificar gracias a su bigote blanco. En Lima se pueden ver fácilmente en el Parque Beato Marcelino Champagnat, Playa Redondo II, en los alrededores del restaurante el Salto del Fraile, en el distrito la Punta y el muelle del Callao.
Esta especie se encuentra exclusivamente en la corriente de Humboldt, o corriente del Perú, y recibe su nombre ya que habita el mismo territorio costal del antiguo imperio Inca. Durante las últimas décadas sus números han disminuido por que deben competir con pescadores por peces pequeños como las anchoas para sobrevivir y por el aumento en la intensidad de tormentas y fenómenos como El Niño Oscilación del Sur, gracias al cambio climático.

4. Chocha Americana – Nueva York
A pesar de ser un centro híper urbanizado, en la ciudad de Nueva York se puede observar un alto número de pájaros. Tan solo en Central Park se han observado más de 280 especies; ya que la ciudad es una parada importante en la Ruta Migratoria de Aves del Atlántico.
Una de las aves más curiosas es la chocha americana, la cual tiene el campo visual más grande de cualquier vertebrado terrestres cubriendo 360 grados en el plano horizontal y 180 en el plano vertical; su único punto ciego es justo encima de su cabeza. Esta ave se puede encontrar durante su migración, en primavera y otoño, en cualquiera de los parques de Nueva York como Central Park, Prospect Park, Greenwood Cementery, Cortlandt Park y Forest Park.
Tristemente la chocha es uno de los pájaros que más se estrellan con las ventanas de los rascacielos, por lo cual también se pueden ver muertas o heridas en las mañanas en cualquier parte de la ciudad.

5. Chamicero Cundiboyacense – Bogotá
Esta ave endémica de la Cordillera Oriental de los Andes se encuentra en varios tipos de ecosistemas entre los 1200 y 3000 metros sobre el nivel del mar. Es una especie solitaria que pasa la mayor parte de su tiempo buscando insectos para alimentarse.
A pesar de su limitado rango no se considera en peligro de extinción ya que la cantidad de individuos a través de los años continúa siendo estable y se ha adaptado muy bien a los espacios humanos. Se puede identificar fácilmente por la mancha café en su cabeza, que parece ser una boina muy estilosa. En Bogotá se puede ver en cualquiera de las quebradas de los cerros orientales, por el cerro de Monserrate, en el parque Simón Bolívar y en los humedales de la ciudad.

6. Golondrina Chilena – Santiago de Chile
Como casi todas las golondrinas del continente, la golondrina chilena se ha beneficiado de la urbanización en el continente. Hoy en día existen más golondrinas en el continente que hace 200 años. Esta familia de aves tiende a vivir en en grupos y hacer sus nidos en huecos de árboles o de rocas; en las ciudades pueden hacer sus nidos en techos, puentes, edificios y agujeros en cualquier construcción humana.
La golondrina chilena se encuentra desde el desierto de Atacama hasta la tierra del fuego. Estos pájaros pasan casi la mayor parte de sus vidas en el aire, ya que sus patas son tan pequeñas que no les sirven para caminar. Las golondrinas chilenas se pueden ver por todo Santiago, pero tal vez son más abundantes en el parque O’Higgins, el parque Bicentenario y el parque de los Reyes.

7. Guacamayo azulamarillo – Caracas
Los guacamayos normalmente se encuentran en las selvas tropicales de Centro y Suramérica, sin embargo existen alrededor de 300 estas aves que se pueden encontrar en la capital venezolana. Existe una leyenda urbana que cuenta que estos pájaros son los descendientes de unas mascotas de un inmigrante italiano en la década de los setenta. Probablemente estos animales llegaron a la ciudad como mascotas que luego se escaparon y que ahora se han adaptado a la vida urbana.
En Caracas se pueden encontrar grupos de guacamayas azulamarrillo en Parque del Este, Parque Fransisco Miranda, El Calvario y en el barrio La Trinidad. Gracias a sus coloridos plumajes las guacamayas han sido capturadas desde tiempos precolombinos e intercambiadas por diferentes culturas indígenas, ayudando a expandir la especie por todo el continente. Algunos historiadores creen que uno de estos animales fue obsequiado a Cristóbal Colón en las Bahamas en su primer contacto con los Taíno.

8. Picamaderos de Guayaquil – Guayaquil
Uno de los pájaros carpintero más grandes del continente se encuentra solamente en los bosques húmedos entre el Océano Pacifico y la Cordillera de los Andes. El alimento principal de este pájaro son los escarabajos y su larva, que encuentra en los árboles de la región. Es raro ver a los picamaderos en centros urbanos como Guayaquil, sin embargo dada la deforestación por la expansión de la frontera agrícola y de los cultivo de coca; estos pájaros se ven obligados a buscar nuevos hábitats. Dada a la pérdida de su ecosistema se considera que esta especie es vulnerable a desaparecer. En Guayaquil hay reportes de esta ave en el Parque Histórico, la Isla Santay y Escuela Superior Politécnica del Litoral.

9. Tocororo – Habana
Este colorido pájaro, conocido como el ave oficial de Cuba, es una de las pocas especies endémicas de esta isla que no está en peligro de extinción. En los mitos Taíno este animal siempre aparece como un mensajero de buenas noticias y buenas fortunas. El tocororo no construye nidos, en vez de eso, busca huecos en árboles o nidos abandonados de otras especies para encontrar su refugio. Recibe su nombre por su sonido característico que suena como un: “toco-toco-tocoro-tocoro.” En la Habana se puede ver por el Malecón, en la Habana Vieja y el Parque Ecológico Monte Barreto.

10. Búho nival – Toronto
Esta ave rapaz vive casi todo el año en la tundra ártica, donde la temperatura promedio varía entre los -34 y -6 grados centígrados. En este ambiente su color blanco le da una gran ventaja para poder camuflar sus nidos que construye en el suelo, que normalmente está cubierto de nieve. Para protegerse del frío tienen plumas en sus pies y tienen una estrategia diferente para cazar basada en ahorrar energía; en vez de buscar activamente comida, se camuflan y esperan pacientemente a su presa.
Estos búhos pasan casi toda su vida en solitario y durante el invierno en el hemisferio norte emigran a Canadá, Estados Unidos, Islandia, Rusia y Escocia. A diferencia de la mayoría de los búhos esta ave no es nocturna y se pueden ver en sitios planos con pocos árboles, en las ciudades es común verlos en los aeropuertos. En Toronto, donde más probabilidad existe de ver al búho nival es en el Aeropuerto Internacional Pearson, Scarborough Dorset Park y las Islas de Toronto.

Los invito a empezar a explorar la naturaleza en sus barrios y sus ciudades, se pueden ver pájaros desde cualquier ventana en el mundo. Herramientas como “ebird” son muy útiles para aprender a reconocer, ubicar y reportar los pájaros y otros animales en nuestras ciudades.
Imagen de portada de Santiago Flórez (@rflorezsantiago) Encuentra más ilustraciones en su Instagram: @bacata_natural